viernes, 24 de octubre de 2008

Una vuelta por Connaught Place

Ayer viernes era mi dia de descanso, así que aproveché para ir a la embajada de España a registrarme. Allí me atendió Isabel, una señora muy amable que lleva ya unos 30 años en el país. Muy maja y atenta.

Aprovechando que tenía tiempo libre, desde allí me dí un paseo de una horita (las distancias son muy engañosas en los mapas de Delhi) hasta Connaught Place, donde había quedado con Nitesh, un chico que ha estado 4 años trabajando en Córdoba, y que tuve el placer de conocer anteayer.

La caminata se me hizo bastante liviana. Es al pasar Indian Gate cuando el número de pesados comienza a aumentar: el típico que tras intercambiar cuatro palabras contigo, te intenta convencer para que visites no se cual tienda..el que te quiere limpiar (e incluso arreglar) los zapatos..los conductores de "rickshaws" pitándote y ofreciéndote llevarte (uno de ellos se bajó, me dijo que era su cumpleaños, y que me daría suerte el montar en su vehículo). Si, chavales, por desgracía, aquí el extranjero es visto como un monedero con patas, aunque hay muchas excepciones.

Nitesh, por ejemplo, es una prueba de que no se puede generalizar. Un chaval muy amigable, abierto, inteligente, y crítico con su país, siempre con animos de que las cosas puedan mejorar. Esperemos que si. Más tarde se nos unió su amigo Bharat, un personaje interesante, conversador y dicharachero, muy buen rollo.


A la izquierda, el cordobés de la India, y a la derecha su colega. Ojo al del bigotazo en el centro.

Conaught Place es el centro neurálgico de Delhi, la plaza central, con un parque en el centro (Central Park). Un lugar donde se concentran multitud de tiendas de ropa, restaurantes selectos, y también mucha mendicidad y miseria. Es terrible el contraste que existe en este país en este aspecto. Ancianas con lepra pidiendo una rupia al lado de escaparates donde resplandecen ostentosos trajes, niños famélicos moribundos tirados en el suelo, a punto de ser pisados por unos zapatos de Gucci, personas con los miembros amputados que salen de donde menos te lo esperas en busca de tu compasión.... estas situaciones son las que, de verdad, más trabajo me está costando y me costará sobrellevar. Creo que este tema merece una entrada aparte, quizás más adelante.







Un poco antes de volver al sur, Nitesh me propuso probar gulab jamun, una especie de bolas hechas con leche condensada y harina, bañadas en caramelo, y que se pueden encontrar en la calle. Sabroso descubrimiento (como me quedé sin batería en el momento de la foto, aqui va una de internet..que viva el google!!)



Y otro cosa que hasta ayer ignoraba. Resulta que en algunos puntos de la ciudad, la Policía de Tráfico tiene instalados unos puestecillos, en los que se puede calcular lo que cuesta un "rickshaw" según el punto al que vayas, y pagar por adelantado. Un sistema de prepago, vamos. Luego ellos te dan un recibo, paran a un conductor (muchos suelen poner excusas para no llevarte, porque saben que salen perdiendo) y le dicen que te lleve. En mi trayecto, todo salió bien y el conductor me llevó a donde quería sin refunfuñar, pero hay casos en los que te pueden dejar tirado, a saber donde. Así que aseguraos que el tio sabe el sitio a donde vais, y que lo veis conforme. Los „rickshaws“ estos también merecen tema aparte, vaya mafia.

6 comentarios:

paco grana dijo...

Vaaaya bolitas chinas guapas y dulces que te has apañao, travieso!!!

Odara dijo...

Sí, el gulab jamun bien bueno que está :)

Oye, por alguna casualidad de la vida el tal Nitesh no se apellidará Gurbani, ¿verdad? Pregúntale, anda... que se parece sospechosamente a un Nitesh que me presentaron en Madrí hace cosa de cinco años. A él le debo la traducción del tatuaje en hindi que llevo en el brazo...

Abrazos!!

Pakonas dijo...

Pues si, me da que va a ser el mismo. Si al final va a ser verdad la teoria esa de los 6 grados de separación :)

polvora dijo...

y yo que pensaba que las bolas chinas eran otra cosa....jejejejejeje

ahora quien me diga que no son comestibles las bolas veras...que buena pinta!

Alfonso dijo...

Eeey, no jodas que de verdad es el mismo Nitesh, ¿le has preguntado? Tío, dale un abrazo de mi parte y dile que al final me hice el tatu, o pásame su emilio y le mando una afoto... :-D

¡El mundo es un pañueeeelo!

Pakonas dijo...

Si, Nitesh Gurmani! :)

En cuanto lo vea se lo digo. Ahora lo veré con más frecuencia, ya que ha empezado a dar clases también, en mi mismo centro.